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"Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo" Carlos Marx

 

Definición de Filosofía

La Filosofía es la ciencia sobre las leyes más generales que rigen el desarrollo de la Naturaleza, la Sociedad y el Pensamiento.

 

El problema fundamental de la Filosofía

El Homo Sapiens (hombre que piensa) apareció hace aproximadamente 195.000 años en un momento determinado de la evolución de las especies.[1] En todo este proceso evolutivo hay que tener en cuenta el papel decisivo que desempeñó el trabajo en la transformación del mono en hombre. Sin embargo, fue tan sólo hace cerca de 50.000 años que aparecen las primeras formas de cultura, y por ende las grandes interrogantes: ¿de dónde venimos?, ¿quiénes somos?, ¿hacia dónde vamos?, ¿qué hay después de la muerte?, ¿por qué se da la vida?, ¿qué es bueno y qué es malo?, etc.

Es así que se va planteando el problema de si primero existe la materia y luego la idea o si la idea es primero y después la materia, constituyéndose éste el problema fundamental que estudia la filosofía. Es decir, se dan las dos concepciones del mundo: IDEALISMO y MATERIALISMO. Vale insistir que ésta no es una simple discusión bizantina, pues de la concepción que elijamos se proyecta absolutamente todo nuestro pensamiento y nuestra vida.

El idealismo se caracteriza por:

— Plantea que la materia es un subproducto de la idea, es decir la idea es la fuente de todas las cosas. Según el idealismo, “primero pensamos y luego existimos”.

— No admite la posibilidad del ser humano para conocer el mundo que le rodea y por ende transformarlo.

— El idealismo se subdivide en dos grandes vertientes: a) idealismo subjetivo: su máximo representante es el filósofo inglés Berkeley quien planteaba que el mundo material sólo existe en las sensaciones y la conciencia de la persona, es decir “reconoce que sólo existe el sujeto que percibe. Todo lo demás es sólo el resultado de la actividad de su conciencia”;[2] b) idealismo objetivo: toma como fundamento la “conciencia sobrepersonal”, la “conciencia en general”, “la razón mundial” que según los idealistas objetivos existe en forma autónoma independientemente del hombre.

— El idealismo de una u otra forma conduce a la creencia en un Dios. La idea de Dios nace hace varias decenas de miles de años como un reflejo fantástico en la mente de los hombres frente a los grandes problemas que lo aquejan y que no puede resolver ni dar explicación coherente en ese momento como, por ejemplo: la erupción de los volcanes, los terremotos, los relámpagos, etc.

— El idealismo no se basa en la ciencia y la dialéctica para descifrar los misterios del mundo, sino en la voluntad, en los sueños, en el misticismo y los dogmas.

— Niega y/o se opone a la posibilidad de un cambio radical en las estructuras sociales

— En el proceso del estudio y la enseñanza asume la escolástica y el memorismo. “Se llama escolástico a todo raciocinio separado de la vida, estéril, a todo verbalismo, a toda erudición vacua, a toda manipulación con los solos conceptos y silogismos, sin relación con los hechos y la práctica.”[3]

El materialismo se caracteriza por:

— Plantea que primero existe la materia y luego la idea; la materia existe independientemente de nuestra conciencia.

— Primero existimos y luego pensamos. O dicho de otra manera podemos pensar porque tenemos un órgano material altamente evolucionado llamado CEREBRO.

— “Nuestra conciencia y nuestro pensamiento por muy trascendentales que parezcan, son el producto de un órgano material físico: el cerebro” F. Engels

— El ser humano puede conocer el mundo y transformarlo.

— Se estructura en dos grandes ramas que se complementan entre sí: materialismo dialéctico y materialismo histórico.

— Niega la existencia de un “Dios” que creó el mundo; en contrapartida plantea la evolución infinita de la materia, que se encuentra en constante cambio y movimiento. El materialismo desecha los dogmas y el misticismo para descifrar los misterios del mundo; asume el método científico y la dialéctica.

— Admite y promueve la posibilidad y necesidad de un cambio radical de las estructuras sociales.

— En el proceso del estudio y la enseñanza asume la investigación científica, la crítica, el debate y la comprobación práctica del conocimiento.

 

EL MATERIALISMO DIALÉCTICO

 

Después de muchos siglos de lucha entre idealismo y materialismo y especialmente cuando va surgiendo el proletariado como clase social en el siglo XIX, se crean las bases para el nacimiento del materialismo dialéctico.

Llámase materialismo dialéctico, porque su modo de abordar los fenómenos de la naturaleza, su método de estudiar estos fenómenos y de concebirlos, es dialéctico, y su interpretación de los fenómenos de la naturaleza, su modo de enfocarlos, su teoría, materialista” Stalin

“El materialismo dialéctico como filosofía del proletariado nació a mediados del siglo pasado y se desarrolló en contacto indisoluble con la práctica del movimiento obrero revolucionario. En la elaboración de esta concepción filosófica de avanzada, Marx y Engels se apoyaban en todas las valiosas adquisiciones del pensamiento humano”[4]

 

Leyes de la Dialéctica

“Para la dialéctica nada hay definitivo, absoluto ni sagrado, porque todo caduca, todo deviene y todo es transitorio” F. Engels

 

Ley Única Fundamental: Ley de la Contradicción

 “La universalidad o carácter absoluto de la contradicción significa, primero, que la contradicción existe en el proceso de desarrollo de toda cosa, y, segundo, que el movimiento de los contrarios se presenta desde el comienzo hasta el fin del proceso de desarrollo de cada cosa.” Mao Tse Tung

Lenin ilustró la universalidad de la contradicción como sigue:

"En matemáticas: + y -. Diferencial e integral.

En mecánica: acción y reacción.

En física: electricidad positiva y negativa.

En química: combinación y disociación de los átomos.

En ciencias sociales: lucha de clases.”[5]

Como vemos la contradicción es un proceso inherente al desarrollo de todas las cosas y fenómenos, es el motor principal. Así por ejemplo tenemos la vida y la muerte, la salud y la enfermedad, lo nuevo y lo viejo, la revolución y la contra-revolución, etc.

“Los contrarios son precisamente los aspectos, tendencias, o fuerzas internas del objeto que se excluyen mutuamente y, al mismo tiempo, se presuponen uno del otro. La relación de indestructible interdependencia de estos constituye la unidad de contrarios.

Así pues, que la lucha de contrarios son las contradicciones existentes en el objeto, precisamente el carácter contradictorio de las tendencias contrapuestas, que se excluyen mutuamente, provoca por necesidad la lucha entre ellas. Lo viejo por lo nuevo, lo que nace y lo que muere en los objetos, no pueden menos de entrar en contradicción. La contradicción, la lucha de contrarios, constituye precisamente la fuente esencial del desarrollo de la materia y la conciencia. El desarrollo es la “lucha” entre tendencias contrapuestas, esta lucha es absoluta, como absolutos son el desarrollo y el movimiento.

El equilibrio de los contrarios es relativo en cualquier proceso. No puede ser de otra manera: si fuera constante, eterno, en el mundo no se produciría desarrollo alguno. Solo la lucha constituye la fuente y fuerza motriz del desarrollo.

La esencia de la ley dialéctica de la unidad y lucha de contrarios está en que lo objetos y los fenómenos se desdoblan en tendencias contrapuestas, constituyen una unidad de contrarios. Las tendencias contrapuestas no existen simplemente, sino que se encuentran en estado de contradicción y lucha permanente entre ellas. La lucha de contrarios constituye el contenido interno y la fuente de desarrollo de la realidad.”

“El caso es que ninguno de los dos aspectos contradictorios puede existir independientemente del otro. Si falta uno de los dos contrarios, falta la condición para la existencia del otro. Piensen: de una pareja de cosas contradictorias o de dos conceptos contradictorios en la conciencia humana, ¿puede uno de los aspectos existir independientemente? Sin vida no habría muerte; sin muerte tampoco habría vida. Sin "arriba" no habría "abajo"; sin "abajo" tampoco habría "arriba". Sin desgracia no habría felicidad; sin felicidad tampoco habría desgracia. Sin facilidad no habría dificultad; sin dificultad tampoco habría facilidad. Sin terratenientes no habría campesinos arrendatarios; sin campesinos arrendatarios tampoco habría terratenientes.

Sin burguesía no habría proletariado; sin proletariado tampoco habría burguesía. Sin opresión nacional por parte del imperialismo no habría colonias ni semicolonias; sin colonias ni semicolonias tampoco habría opresión nacional por parte del imperialismo. Así sucede con todos los contrarios: en virtud de determinadas condiciones, junto con oponerse el uno al otro, están interconectados, se impregnan recíprocamente, se interpenetran y dependen el uno del otro; esto es lo que se denomina identidad. Los aspectos de toda contradicción se llaman contrarios porque, en virtud de determinadas condiciones, existe entre ellos no-identidad. Pero también existe entre ellos identidad, y por eso están interconectados. A esto se refería Lenin cuando dijo que la dialéctica estudia "cómo los contrarios pueden [ . . . ] ser idénticos ". ¿Por qué pueden serlo? Porque cada uno constituye la condición para la existencia del otro. Este es el primer sentido de la identidad.

Pero ¿basta con afirmar que cada uno de los dos aspectos contradictorios es la condición para la existencia de su opuesto, que hay identidad entre uno y otro, y que, por consiguiente, ambos pueden coexistir en un todo único? No, no basta. La cuestión no se limita a la interdependencia de los contrarios; más importante aún es la transformación del uno en el otro. Esto significa que, en razón de determinadas condiciones, cada uno de los aspectos contradictorios de una cosa se transforma en su contrario cambiando su posición por la de éste. Tal es el segundo sentido de la identidad de los contrarios.

¿Por qué existe identidad aquí también? Obsérvese cómo, a través de la revolución, el proletariado se transforma de clase dominada en clase dominante, en tanto que la burguesía, hasta entonces dominante, se transforma en dominada, cambiando cada cual su posición por la que originalmente ocupaba su contrario.”[6]

La ley de la contradicción aplicada a la sociedad se expresa en la lucha entre revolución y contra-revolución, entre el imperialismo (EEUU, China, Rusia y otros países) y las naciones oprimidas, entre la semi-feudalidad y las amplias masas del pueblo, entre el capital y el trabajo; y, en la lucha de dos líneas que se da en el interior de los partidos comunistas y organizaciones revolucionarias como reflejo de la lucha de clases en la sociedad.

Existen dos tipos de contradicciones:

Contradicciones Antagónicas y contradicciones no antagónicas.

Contradicciones Antagónicas. -Se denominan también irreconciliables, es decir que no pueden resolverse pacífica o evolutivamente, sino exclusivamente por vía revolucionaria. Por ejemplo, en la sociedad, existen contradicciones antagónicas entre el imperialismo y las naciones oprimidas, entre la semi-feudalidad y las amplias masas del pueblo, entre el capital y el trabajo.

Contradicciones No Antagónicas. -Son aquellas que pueden resolverse pacíficamente, como por ejemplo las que existen entre obreros y campesinos, o entre estos dos y la intelectualidad progresista.

 

Leyes Secundarias

Éstas son leyes de la dialéctica de carácter secundario que giran en torno a la ley única fundamental de la contradicción.

 

Ley de la Negación de la Negación

“La ley de la negación de la negación da a conocer la dirección general, la tendencia, del desarrollo del mundo material. En cualquier campo de la realidad material se opera constantemente el proceso de muerte de lo viejo, caduco, y nacimiento de lo nuevo, progresivo. La sustitución de lo viejo por lo nuevo, de lo que muere por lo que nace, es precisamente el desarrollo; y el propio vencimiento de lo viejo por lo nuevo, que surge a base de lo viejo, se llama negación.

La negación constituye un momento inseparable del desarrollo de la propia realidad material. En ninguna esfera puede existir desarrollo que no niegue sus formas precursoras de existencia. El desarrollo de la corteza terrestre, por ejemplo, paso varias épocas geológicas, siendo cada nueva época, que surgía a base de la anterior, determinada negación de la vieja. En el mundo orgánico cada especie nueva de planta o animal, surgida a base de la vieja, es al mismo tiempo su negación. La historia de la sociedad constituye también una cadena de negaciones de viejos regímenes sociales por nuevos, la sociedad primitiva fue negada por la esclavista, la esclavista fue negada por la feudal, el feudalismo por el capitalismo y el capitalismo por el socialismo. La negación es también inherente al desarrollo del conocimiento, de las ciencias. Cada teoría nueva, más perfecta, vence a la vieja, menos perfecta. La negación no es traída al objeto o fenómeno desde el exterior. Es el resultado de su propio desarrollo interior.

Los objetos y fenómenos como ya sabemos, son contradictorios y, al desarrollarse a base de las contradicciones internas, crean en ellos mismos las condiciones de su propia destrucción para pasar a otra calidad nueva, superior. La negación es precisamente la superación de lo viejo a base de las contradicciones internas, el resultado del autodesarrollo y automovimiento de los objetos y fenómenos.

Así, hemos aclarado que, como resultado de la negación, se resuelve una u otra contradicción, se destruye lo viejo y se consolida lo nuevo.

Mas ¿Cesa el desarrollo ahí?, no, el desarrollo no se interrumpe con el nacimiento de lo nuevo. Lo nuevo no es eternamente nuevo; al desarrollarse, prepara premisas y condiciones para el nacimiento de algo más nuevo y avanzado.

Tan pronto como estas premisas y condiciones maduren, vuelve a manifestarse la negación, esta es ya la negación de la negación, o sea, la negación de lo que antes venciera a lo viejo, la sustitución de lo nuevo por algo más nuevo. El resultado de esta segunda negación vuelve a ser negado, vencido y así sucesivamente.

El desarrollo se manifiesta, pues, como incontable multitud de negaciones que se suceden una a la otra, como una sustitución infinita y superación de lo viejo por lo nuevo, he ahí el carácter progresivo del desarrollo.

La afirmación que el carácter progresivo del desarrollo es el rasgo principal, pero no el único, de la ley de la negación de la negación. Esta ley no caracteriza el desarrollo como un movimiento rectilíneo, sino como un movimiento extraordinariamente complejo, algo así como un proceso en forma de espiral en el que se repiten de cierto modo las etapas recorridas y se retrocede, en cierto sentido, hacia el pasado.

Es un desarrollo que parece repetir las etapas ya recorridas, pero de otro modo, sobre una base más alta (negación de la negación); un desarrollo que no discurre en línea recta sino en espiral. El carácter espiral del desarrollo es propio de distintas esferas de la realidad.

La esencia de la ley de negación de la negación en el desarrollo se produce negando lo viejo por lo nuevo, lo inferior por lo superior. Por cuanto lo nuevo, al negar lo viejo, conserva y desarrolla sus rasgos positivos, el desarrollo adquiere un carácter progresivo. Al mismo tiempo discurre en espiral, repitiendo en las fases superiores algunos aspectos y rasgos de las inferiores.”

 

Ley de los cambios cuantitativos y cualitativos

“Alcanzados ciertos niveles de cambios cuantitativos, se produce, repentinamente, un cambio cualitativo.” Por ejemplo, cuando se pone a hervir el agua llega un momento en que el aumento del calor hace que el elemento líquido se transforme en elemento gaseoso, es decir tuvo un cambio cualitativo.

“De ahí que, los cambios no son continuos, llega un momento en que, en lugar de pequeños cambios, se produce un salto brusco o violento; por eso, los cambios no son únicamente externos, sino que afectan radicalmente a las propiedades internas de los objetos o fenómenos de la naturaleza, de la sociedad o del pensamiento. Mediante esta ley, la dialéctica materialista aporta su solución al problema de optar entre revolución o reforma. El cambio cualitativo siempre da origen a una sociedad nueva que no es compatible con la anterior y que, por tanto, no puede originarse por la reforma de ésta.”[7] De esta manera se explica porque ningún cambio trascendente en la historia de la humanidad ha podido realizarse de forma pacífica o electoral, es decir evolutivamente, sino únicamente mediante la lucha armada de los pueblos contra sus opresores, es decir por vía revolucionaria.

 

EL MATERIALISMO HISTÓRICO

 

“El materialismo histórico es la aplicación consecuente de los principios del materialismo dialéctico al estudio de los fenómenos sociales”[8]

Estudia varias categorías, pero las principales son: la formación económico-social y la lucha de clases.

 

Formación Económico-Social

Toda sociedad posee una estructura y súper-estructura. La estructura es la base económica sobre la cual se asienta una sociedad determinada, esto es el modo de producción. La súper- estructura es el conjunto de instituciones e ideas políticas, jurídicas, religiosas, culturales, etc., que como producto de la estructura económica se proyectan en la súper-estructura ideológica.

Así, a determinado modo de producción le corresponden determinadas instituciones e ideas dominantes. En este sentido, el ser social determina la conciencia social.

Existen cinco modos de producción:

Comunidad Primitiva,

              Esclavismo,

                      Feudalismo,

                              Capitalismo y

                                          Comunismo.

Entre el capitalismo y el comunismo existe una fase de transición denominada socialismo. En los países donde se desenvuelve el capitalismo burocrático, para llegar al socialismo se hace necesaria la etapa de la revolución de Nueva Democracia.

 “Así como Darwin descubrió la ley de la evolución del mundo orgánico, Marx descubrió la ley de la evolución de la historia humana: el hecho tan sencillo, pero hasta entonces bajo la maleza ideológica, de que el hombre necesita, en primer lugar, comer, beber, tener un techo y vestirse antes de poder hacer política, ciencia, arte, religión, etc., que, por tanto, la producción de los medios materiales inmediatos de vida y, por consiguiente, la correspondiente fase de evolución económica de un pueblo o de una época, son la base sobre la cual se han desarrollado las instituciones estatales, las concepciones jurídicas, el arte e incluso las ideas religiosas de los hombres, y con arreglo a la cual deben, por tanto, explicarse; y no al revés, como hasta entonces se había venido haciendo

  1. Engels

 

Ante todo, los marxistas consideran que la actividad del hombre en la producción es su actividad práctica más fundamental, la que determina todas sus demás actividades.”

Mao Tse Tung

 

Cada formación económico-social tiene sus leyes históricas especiales de nacimiento, desarrollo y muerte. El paso de una forma de sociedad a otra no se realiza de modo casual, sino estrictamente con arreglo a leyes, en virtud de las contradicciones que se desarrollan en el seno de la vieja sociedad que la conducen a la muerte y crean la base para un régimen nuevo, más progresivo”.[9]

El sistema socialista terminará por reemplazar al sistema capitalista: ésta es una ley objetiva, independiente de la voluntad del hombre. Por mucho que los reaccionarios traten de frenar la rueda de la historia, tarde o temprano se producirá la revolución y, sin duda alguna, triunfará.”

 Mao Tse Tung

 

Lucha de clases

Toda la historia de la humanidad (desde que apareció la propiedad privada sobre los medios de producción) es la historia de la lucha de clases” Carlos Marx

En la comunidad primitiva no existía la propiedad privada sobre los medios de producción; por ende no existía el Estado y toda su maquinaria burocrático-militar. La sociedad entera vivía en relativa armonía, pues el trabajo era colectivo, así como la repartición de los frutos recolectados y de la carne y pieles producto de la caza y pesca.

Sin embargo, en un determinado momento del desarrollo de la comunidad primitiva comenzó a existir un excedente de producción el cual fue apoderado por unos pocos en contra de muchos. Se dieron entonces

luchas intestinas sangrientas. Las armas como la flecha, el hacha, la lanza y otras que servían para cazar animales fueron utilizadas contra el mismo hombre. Surgieron entonces las primeras formas de Estado y ejército, utilizados por la minoría para oprimir a la mayoría y aplastar su resistencia. Es en medio de estos acontecimientos cuando la comunidad primitiva se disgrega y da paso al esclavismo, donde las clases sociales fundamentales eran el esclavista y el esclavo. Luego tendremos el feudalismo donde las clases antagónicas eran el señor feudal y el siervo de la gleba y ahora el capitalismo, donde se enfrentan la burguesía y el proletariado como clases fundamentales. Lógicamente en cada formación económico-social no sólo existen las dos clases principales que son antagónicas sino una serie de otras clases, fracciones de clase e incluso capas y castas sociales dentro de cada clase, todo esto de acuerdo al desigual desarrollo histórico.

En este punto vale profundizar sobre el papel que cumple el Estado y sus fuerzas represivas en medio de la lucha de clases. Como estudiamos, cuando aparece la propiedad privada sobre los medios de producción, simultáneamente aparecen las clases sociales y las luchas sangrientas entre un grupo y otro. Sin embargo, era una minoría la que se apropiaba de los excedentes de producción, controlaba y explotaba a la mayoría. Este control y explotación no serían posibles sin el uso sistemático de una fuerza militar para aplastar la resistencia de los explotados y generar obediencia y sumisión sobre la base de la represión institucionalizada. Es así que la ciencia del materialismo histórico acertadamente plantea que el Estado no es sino “el órgano de opresión de una o clase social sobre otras clases sociales” y que el derecho es “la voluntad de la clase dominante erigida en ley”. Todo esto se presenta de manera irrefutable en el Estado de los explotadores: el Estado esclavista, feudal y capitalista. En cambio, en el Estado de Nueva Democracia y el Estado Socialista (según la etapa de la revolución) son los trabajadores y los pueblos quienes gobiernan directamente; de esta manera se da democracia a las amplias masas populares y en cambio se reprime a los burgueses y terratenientes derrocados, a los reaccionarios, a quienes quieren seguir viviendo de la explotación del trabajo ajeno, de la opresión del pueblo. Estados de este tipo se dieron en la Revolución Socialista de Octubre (1917-1956) y la Revolución de Nueva Democracia y posterior construcción del Socialismo en China (1949-1976).

“Las clases luchan, unas clases salen victoriosas, otras quedan eliminadas. Así es la historia, así es la historia de la civilización de los últimos milenios. Interpretar la historia desde este punto de vista es materialismo histórico; sostener el punto de vista opuesto es idealismo histórico.”[10]

La práctica social del hombre no se reduce a su actividad en la producción, sino que tiene muchas otras formas: la lucha de clases, la vida política, las actividades científicas y artísticas; en resumen, el hombre, como ser social, participa en todos los dominios de la vida práctica de la sociedad. Por lo tanto, va conociendo en diverso grado las diferentes relaciones entre los hombres no sólo a través de la vida material, sino también a través de la vida política y la vida cultural (ambas estrechamente ligadas a la vida material). De estas otras formas de la práctica social, la lucha de clases en sus diversas manifestaciones ejerce, en particular, una influencia profunda sobre el desarrollo del conocimiento humano. En la sociedad de clases, cada persona existe como miembro de una determinada clase, y todas las ideas, sin excepción, llevan su sello de clase.”

Mao Tse Tung [11]

 

La lucha de clases es el motor del proceso histórico social en las sociedades antagónicas.

En la época del capitalismo, la lucha de clases emprendida por el proletariado tiene tres formas fundamentales: lucha económica, es la más simple y busca mejorar las condiciones materiales, por ejemplo, alza de salarios, entrega de viviendas, etc. La lucha política es la que busca destruir la propia base del sistema capitalista, es la lucha por el poder estatal, por la dictadura del proletariado. Finalmente, la lucha ideológica consiste en la toma de conciencia de los intereses de clase del proletariado mediante una teoría revolucionaria para luchar contra la ideología burguesa que predomina en la sociedad capitalista, la lucha por la victoria de la ideología socialista. Estas tres formas de lucha del proletariado cuando son adecuadamente combinadas y ejercidas se convierten en una poderosa lucha revolucionaria por una nueva sociedad.

El materialismo histórico nos demuestra científicamente que la propiedad privada sobre los medios de producción, las clases sociales y el Estado, no son eternos. Surgieron en una determinada fase del desarrollo histórico, es decir tienen un inicio y por ende tienen un final. La propiedad privada sobre los medios de producción, las clases sociales y el Estado (entendido como aparato burocrático-militar) desaparecerán definitivamente en el Comunismo, que no es sino la sociedad del trabajo, de la ciencia y el progreso infinitos de la humanidad en una nueva era de felicidad y paz perdurables.

“Sólo con la formación económico-social comunista comienza la historia auténticamente humana, cuando los hombres, emancipados del yugo capitalista y transformados en dueños de sus propias relaciones, desenvuelven sus capacidades en todos sus aspectos”[12]

El comunismo contemporáneo no es un simple retorno al régimen del comunismo primitivo, como lo plantean los imperialistas y reaccionarios, sino que representa una fase inmensamente superior en la evolución de la Sociedad, con un alto nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, de la ciencia y tecnología; lo más progresivo que existirá en la actual etapa del desarrollo histórico de la humanidad.

 

LECTURAS RECOMENDADAS

 

Manuscritos económicos y filosóficos de 1844. Carlos Marx

Tesis sobre Feuerbach. Carlos Marx

Feuerbach: oposición entre las concepciones materialista e idealista. Carlos Marx

Miseria de la Filosofía. Carlos Marx

El papel del trabajo en la transformación del mono en hombre. Federico Engels

El Origen de la Familia, la Propiedad Privada y el Estado. Federico Engels

Materialismo y Empiriocriticismo. V.I. Lenin

Sobre el Materialismo Dialéctico y el Materialismo Histórico. Stalin

Cinco Tesis Filosóficas. Mao Tse Tung

 

“En nuestro país se desenvuelve el capitalismo burocrático, esto es un tipo de capitalismo sometido al imperialismo y anclado a la semi-feudalidad; propio de los países oprimidos donde no triunfó la revolución burguesa. Vivimos bajo la opresión imperialista, principalmente de EEUU y China, con una dictadura de grandes burgueses y terratenientes disfrazada con elecciones fraudulentas y una falsa participación popular. Para salir de esta grave crisis sólo nos queda un camino: luchar por la Revolución de Nueva Democracia para aplastar a las tres montañas que oprimen al pueblo y que son el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semi-feudalidad. En este proceso los estudiantes y maestros no podemos ser indiferentes, pues estamos con el pueblo y sus luchas o caso contrario seremos cómplices, directa o indirectamente, de la explotación y opresión social.”

 

 

GRÁFICO DE LA ESPIRAL DIALÉCTICA APLICADA AL DESARROLLO DE LA SOCIEDAD

 

 

 

[1] Página web: elmundo.es /sección “Ciencia, Ecología”: Análisis de los restos de Herto (Etiopía). 16/02/2005

[2]  Diccionario de FilosofíaRosental – Yudin” Tema: Idealismo

[3] Diccionario de FilosofíaRosental-Yudin” Tema: Escolástica

[4] Diccionario de Filosofía “Rosental – Yudin” Tema: Materialismo Dialéctico

[5] Los fundamentos del leninismo. J. Stalin. III

[6] Sobre la Contradicción; Mao Tse Tung. 1937

[7] Curso de Filosofía. Abraham Gutiérrez, pág. 204

[8] Diccionario de Filosofía “Rosental – Yudin” Tema: Materialismo Histórico

[9] Diccionario de Filosofía “Rosental-Yudin”. Tema: Formación Económico-Social.

[10] Desechar las ilusiones, prepararse para la lucha. 14/08/1949

[11] Sobre la práctica. Julio / 1937.

[12]  Diccionario de Filosofía “Rosental-Yudin” Tema: Formación Económico-Social

 

 

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