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Comunista navarra. Taquígrafa. Cuando los principales dirigentes del PCE abandonaron Francia, fue puesta por “Antón” al frente de la delegación del Comité Central en este país. Según Mikel Rodríguez, se esperaba de ella tareas burocráticas, principalmente tramitar visados para que los últimos dirigentes dejasen al país antes de que los nazis les capturaran. Su prioridad era salvar a Francisco Antón, preso en el campo de Vernet, interviniendo el propio Stalin para lograr su excarcelación. Decidió quedarse en Francia y luchar. Por entonces era pareja de Jesús Monzón y juntos comenzaron a controlar y organizar la militancia. En Aix-en-Provence contaban con León Trilla, Sixto Agudo, Pelayo Tortajada, Joaquín Puig y Manuel Sánchez. En Montauban estaban Manuel Azcárate y “Tacho” Amilibia. En Toulouse se encontraba Jaime Nieto y en París había células del PSUC.

Tras la ocupación de París, el armisticio franco-alemán del 22 de junio de 1940 dividía a Francia en dos: la “zona ocupada”, bajo control directo de los nazis, y la “Francia libre”, con capital en Vichy, bajo administración francesa. 

La Delegación del CC del PCE para Francia se estableció en Marsella y preparó una reunión para poner en marcha la organización del PCE a la que asistieron: Carmen de Pedro, Jesús Monzón, Manuel Azcárate, Jaimen Nieto, Manolo Gimeno, Ángel Celada “Paco” y Jesús Carreras. Según Sixto Agudo (2003, 245), la reunión, tras valorar lo realizado hasta la fecha (reunión de Argelès-sur-Mer, etc.) decidió: 1º. Iniciar una selección de cuadros del PCE en condiciones de ayudar al PCE en el interior de España. 2º. Asegurar la organización del PCE en los departamentos de Francia y coordinar la acción de éstos. 3º. Luchar al lado del pueblo francés contra el nazismo invasor, e impedir la ayuda de España a los ejércitos hitlerianos.

Tras la invasión de la Unión Soviética por Alemania el 22 de junio de 1941, se celebró una reunión a la que asistieron Jesús Monzón, Carmen de Pedro, Amilibia, Nieto, Tortajada y Adela Collado. Decidieron organizar la lucha armada de los españoles contra los nazis, iniciando la política de Unión Nacional.

En agosto apareció el periódico de Unión Nacional, Reconquista de España. Se editaba con una imprenta Minerva prestada por los comunistas italianos. Con esta misma imprenta se realizaba también Mundo Obrero y Alianza, órganos del PCE y de la JSU.

En septiembre de 1942 la política de Unión Nacional fue adoptada como doctrina oficial del Comité Central, siendo la misma ratificada en una reunión celebrada en Grenoble en noviembre de 1942. Jaime Nieto, Ángel Celada y Manuel Sánchez Esteban formaban el comité sur del PCE, la Francia “libre”, y Joseph Miret, Emilio Nadal y Daniel Sánchez Vizcaíno administraban la zona ocupada. Azcárate trataba de ponerlas en contacto. El vértice de todo este proceso reorganizativo era la Delegación del Comité Central, presidida nominalmente por Carmen de Pedro y, en realidad, por Jesús Monzón y su adjunto, Gabriel León Trilla.

En febrero de 1943 pasó, junto a Manuel Azcárate, a Suiza con el objetivo de facilitar las comunicaciones, entrevistarse con la oposición monárquica, potenciar internacionalmente el movimiento y conseguir recursos económicos. Estando en Suiza hubo un intento para que el equipo de pasos del PCE se hiciera cargo de judíos que huían del nazismo, y de paso recaudar algún dinero. El pacto lo sellaron Carmen de Pedro y Azcárate, Por el PCE, y McClean, por los americanos. Según los dos interlocutores españoles, se cumplieron varios encargos, eventualidad que niega Gimeno, responsable del partido en Francia en ausencia de Monzón. Tras la liberación del sur de Francia, regresó a Toulouse, participando en las reuniones preparatorias, como miembro de la Comisión de Trabajo del PCE, de la Operación Reconquista de España.

La decisión de entrar militarmente en territorio español correspondió a Monzón, siendo apoyado por las delegaciones del Comité Central, tanto en Toulouse (Carmen de Pedro “María Luisa”, Manuel Gimeno “Raul” y Manuel Azcárate “Juan”) como en Madrid (Gabriel León Trilla y Apolinario Poveda).

Según Secundino Serrano (2005, 525), los responsables de planificar la operación fueron los responsables políticos del PCE en Francia y mandos de la AGE. El grupo dirigente estaba integrado por tres guerrilleros (Luis Fernández, Juan Blázquez y Vicente López Tovar) y tres políticos (Gimeno, De Pedro y Azcárate). En las reuniones participaron asimismo Ramiro López Pérez, Eduardo Sánchez-Biedma, Miguel Ángel Sanz y Joaquín Yúfera. La elección recayó en el valle leridano de Arán, un escenario en el que podía establecerse un “territorio libre”, al estar mejor comunicado con Francia –Pont de Rei y Portillón- que con España y que en invierno quedaba prácticamente aislado.

Controlando el puerto de Bonaigua y el túnel de Vielha, los invasores dispondrían de tiempo suficiente para instalar durante algún tiempo un Gobierno republicano en suelo español, concretamente en Vielha, una localidad de 821 habitantes y piedra angular de toda la maniobra. Posteriormente se casó con Agustín Zoroa Sánchez “Darío”, responsable del PCE y la organización guerrillera en España, militando en la Unión de Mujeres Antifascistas en Francia