Categoría: LENIN
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INDICE 

VII             Prefacio

                                             1907

1-39          CONTRA EL BOICOT (Notas de un publicista socialdemócrata)     
40-48        EN MEMORIA DEL CONDE GUEIDEN (Lo que enseñan al pueblo nuestros "demócratas" sin partido)
49-51      TESIS DEL INFORME SOBRE LA ACTITUD DEL PARTIDO OBRERO SOCIALDEMOCRATA ANTE LA TERCERA DUMA, PRONUNCIADO EL 8 DE JULIO EN LA CONFERENCIA URBANA DE PETERSBURGO
53-57        * PROYECTOS DE RESOLUCIÓN PARA LA TERCERA CONFERENCIA DEL POSDR ("SEGUNDA CONFERENCIA DE TODA RUSIA")

* Con asteriscos se señalan los títulos dados por el Instituto de Marxismo-Leninismo adjunto al CC del PCUS.

58-70    NOTAS DE UN PUBLICISTA
71-78    EL CONGRESO SOCIALISTA INTERNACIONAL DE STUTTGART
79-80    * OBSERVACIONES A LA RESOLUCIÓN DEL CONGRESO DE STUTTGART SOBRE EL MILITARISMO Y LOS CONFLICTOS INTERNACIONALES
83-92      EL CONGRESO SOCIALISTA INTERNACIONAL DE STUTTGART
93-95   * ACOTACIONES AL ARTICULO DE CLARA ZETKIN "EL CONGRESO SOCIALISTA INTERNACIONAL DE STUTTGART
99-118   PROLOGO A LA RECOPILACIÓN "EN 12 AÑOS"
119-122 LA PROPAGANDA ANTIMILITARISTA Y LAS ORGANIZACIONES DE LA JUVENTUD SOCIALISTA OBRERA
123-133 REVOLUCIÓN Y CONTRARREVOLUCIÓN
134-136 ASI ESCRIBEN LA HISTORIA LOS "SOCIALISTAS REVOLUCIONARIOS"
137-145 LA CONFERENCIA DE LA ORGANIZACIÓN DE SAN PETERSBURGO DEL POSDR. 27 de octubre (9 de noviembre) de 1907
146-156 LA TERCERA DUMA
157-158 * EN TORNO A UN ARTICULO DE PLEJANOV
159-165 LOS PREPARATIVOS DE UNA "REPUGNANTE ORGIA"
166-174 ¿QUIENES SON LOS JUECES?
174-182 * CUARTA   CONFERENCIA   DEL   POSDR   ("TERCERA CONFERENCIA DE TODA RUSIA") 5-12 (18-25) de noviembre de 1907
183-190 LA TERCERA DUMA DE ESTADO Y LA SOCIALDEMOCRACIA
191-199 ANTE LOS SINDICATOS
201-440 EL PROGRAMA AGRARIO DE LA SOCIALDEMOCRACIA EN LA PRIMERA REVOLUCIÓN RUSA DE 1905-1907
204      Capítulo I. Las bases económicas y la esencia de la revolución agraria en Rusia  
244      Capitulo II. Los programas agrarios del POSDR y su comprobación en el curso de la primera revolución
286       Capítulo III. Los fundamentos teóricos de la nacionalización y de la municipalización
321       Capitulo IV. Consideraciones de orden político y táctico en torno a las cuestiones del programa agrario
366       Capitulo V. Las clases y los partidos en los debates sobre el problema agrario en la segunda Duma

                                      1908

441-447 NOTAS POLÍTICAS
448          * DECLARACIÓN DE LA REDACCIÓN DE "PROLETARI" 
449-453  NUEVA POLÍTICA AGRARIA LA NEUTRALIDAD DE LOS SINDICATOS
466-470  ACERCA DE LO SUCEDIDO AL REY DE PORTUGAL
471-478 DEBATES SOBRE LA AMPLIACIÓN DE LOS DERECHOS PRESUPUESTARIOS DE LA DUMA
479         * POSTDATA AL ARTICULO "DEBATES SOBRE LA AMPLIACIÓN DE LOS DERECHOS PRESUPUESTARIOS DE LA DUMA"
490-194 ENSEÑANZAS DE LA COMUNA... UNA EXHIBICIÓN PATRIOTERO-POLICIACA DE ENEL ENGAÑO DEL PUEBLO POR LOS LIBERALES
495-499  COMO JUZGA A MARX EL LIBERALISMO INTERNACIONAL

                               MATERIALES PREPARATORIOS

503-508 MATERIALES PARA LA TERCERA CONFERENCIA DEL POSDR ("SEGUNDA DE TODA RUSIA"). 21-23 de julio (3-5 de agosto) de 1907

 

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511-516 Relación de obras de Lenin no halladas hasta el presente (Junio de 1907-marzo) de 1908)
517-520 Relación de publicaciones y documentos en cuya redacción tomó parte Lenin
521-523 Relación de trabajos que posiblemente pertenecen a Lenin
572-614 Índice de obras y fuentes literarias citadas y mencionadas por Lenin.
615-647 Índice onomástico.......
648-661 Cronología de la vida y la actividad de Lenin.....
662  INDICE

 

   PREFACIO

 

El decimosexto tomo de las Obras Completas de V. I. Lenin contiene los trabajos escritos entre junio de 1907 y marzo de 1908. Este volumen, como algunos de los subsiguientes, comprende textos correspondientes a los años de reacción, uno de los períodos más duros de la historia del Partido Bolchevique.

Tras el golpe de Estado, que efectúa el 3 (16) de junio de 1907, el Gobierno del zar se ensaña con los obreros y campesinos revolucionarios. Los consejos de guerra por vía sumaria y las expediciones punitivas con un balance de millares de obreros y campesinos fusilados, las zonas de confinamiento y los presidios repletos de revolucionarios, la persecución encarnizada de las organizaciones obreras y campesinas, así como de la prensa obrera, resumen los rasgos que caracterizan esencialmente la situación política a la sazón imperante.

A la par, se trata de una etapa singular en el transitar del zarismo por los caminos de la monarquía burguesa, del parlamentarismo burgués ultrarreaccionario, de la política burguesa del zarismo en el campo. Con el propósito de hacer de los kulaks un puntal clasista para sí, el zarismo acometió la ruptura violenta de la comunidad campesina, la realización de una nueva política agraria calificada por Lenin de "bonapartismo agrario". Tratábase de adecuar el zarismo a las nuevas circunstancias, de abrir la última válvula para prevenir una revolución en el futuro.

La ofensiva política del Gobierno zarista contra la clase obrera y sus organizaciones iba acompañada de la ofensiva económica de los capitalistas, cuya meta era la supresión de las conquistas arrancadas en el curso de la revolución. Los salarios descendían en todas partes, prolongábase la jornada laboral, se generalizaba la práctica del lock-out, se despedía a los obreros de ideas revolucionarias, se hacía circular "listas negras", etc. De 1907 a 1909 se registró una depresión en la industria, hubo descenso de la producción y del número de obreros en una serie de ramas y aumentó el desempleo.

El Gobierno del zar perseguía con particular saña a los bolcheviques como promotores de la lucha contra la autocracia, como los enemigos más intransigentes del viejo régimen. La policía zarista trataba de capturar a Lenin, quien por entonces residía clandestinamente en Finlandia. Por acuerdo del Centro Bolchevique, Lenin se trasladó a un lugar retirado de este país y, desde allí, en diciembre de 1907, al extranjero.

En las difíciles condiciones de la ofensiva reaccionaria, Lenin realiza una ingente labor teórica y organizativa para fortalecer el Partido Bolchevique, preparar y unir las fuerzas con vistas a la revolución venidera. Más tarde, en La enfermedad infantil del "izquierdismo" en el comunismo, caracterizaría este período de la siguiente manera: "Años de reacción (1907-1910). El zarismo ha triunfado. Han sido aplastados todos los partidos revolucionarios y de oposición. Desaliento, desmoralización, escisiones, dispersión, traiciones, pornografía en vez de política. Reforzamiento de las tendencias al idealismo filosófico; misticismo, como disfraz de un estado de espíritu contrarrevolucionario. Pero, al mismo tiempo, esta gran derrota da a los partidos revolucionarios y a la clase revolucionaria una verdadera lección sumamente saludable, una lección de dialéctica histórica, una lección de inteligencia, de destreza y arte para conducir la lucha política. Los amigos se conocen en la desgracia. Los ejércitos derrotados se instruyen aplicadamente". (Obras Completas, t. 41.) 

En los trabajos reunidos en este tomo, Lenin elabora las cuestiones programáticas, tácticas y organizativas del bolchevismo, defiende y desarrolla la teoría marxista en pugna con la ideología burguesa, con el oportunismo y el revisionismo, y dedica atención particular a la valoración marxista de la situación existente y a las tareas del Partido ante la ofensiva de la reacción, al análisis de la economía y del encuadramiento de las fuerzas clasistas en el país, al balance de la primera revolución rusa y a las perspectivas de la lucha revolucionaria

A la hora de caracterizar la peculiaridad de la economía de Rusia, Lenin hace ver una contradicción profunda que determina las particularidades de la revolución rusa: "la propiedad agraria más atrasada, la rusticidad más salvaje, ¡junto al capitalismo industrial y financiero más adelantado!" (tomo presente, pág. 444). Al entrar Rusia en la fase monopolista del capitalismo, la concentración de la producción en la industria había adquirido gran amplitud, proceso este que se intensificó fuertemente a raíz de la crisis industrial de 1900 a 1903, que conllevó la ruina y el desplazamiento de gran número de empresas pequeñas y el crecimiento acelerado de las corporaciones monopolistas. Estas asociaciones y otras de tipo similar acaparaban la gran industria, los transportes y las actividades bancarias. Al propio tiempo subsistían en Rusia formas atrasadísimas de economía, como el latifundio de carácter feudal y la mísera hacienda campesina dotada con aperos rudimentarios.

Sólo una revolución podía poner fin a las contradicciones cada vez más profundas entre unas fuerzas productivas que el capitalismo acrecentaba y los vestigios de la servidumbre —el latifundio y el zarismo— que las trababan. Al señalar que no estaban resueltos los problemas que planteaban a la revolución rusa la marcha objetiva de la historia y la situación de las vastas masas populares, Lenin subrayaba que era inevitable a corto plazo una revolución victoriosa en Rusia. "Rusia —escribió en octubre de 1907— no puede salir por vía pacífica de la crisis que atraviesa" (pág. 151).

Para Lenin, un partido del proletariado, fiel a los principios del marxismo, era poderoso instrumento para la victoria de la revolución. "Hemos sabido trabajar durante largos años antes de la revolución. No en vano, dicen de nosotros que somos firmes como la roca —decía Lenin a propósito de los bolcheviques—. Los socialdemócratas han forjado un partido proletario que no se desanimará ante el fracaso de la primera acometida armada, que no perderá la cabeza ni se dejará llevar de aventuras. Este partido va hacia el socialismo sin vincularse ni vincular su suerte al desenlace de tal o cual período de las revoluciones burguesas. Precisamente por eso está libre de los lados débiles de las revoluciones burguesas. Y este partido proletario va hacia la victoria" (pág. 447).

Enseñaba Lenin que este partido de la clase obrera debía fundar su táctica teniendo en cuenta que era inevitable una nueva crisis revolucionaria, una crisis que hundía sus raíces ' en las condiciones objetivas de la realidad rusa y que no se haría esperar. Era tarea del Partido prepararse para ella, mantener y fortalecer sus organizaciones clandestinas, conjugar el trabajo clandestino con las actividades en cualquier organización legal donde hubiera masas obreras y preparar a éstas para el nuevo ascenso del movimiento revolucionario.

Lenin llamaba a estudiar atentamente la experiencia de la lucha inconciliable de los bolcheviques contra los oportunistas y revisionistas de todo género. En el Prólogo a la recopilación "En 12 años" —de hecho, la primera edición de sus Obras—, Lenin subraya que ello "es necesario para fortalecer el marxismo revolucionario y para templar a la clase obrera rusa en su lucha liberadora" (tomo presente, pág. 118). En dicho escrito quedan aclarados importantes problemas de la historia del Partido Bolchevique y de la teoría del leninismo, el marxismo de la nueva época histórica. Al hacer el balance de la lucha ideológica desplegada de 1895 a 1907 contra los "marxistas legales", los "economistas" y los mencheviques, Lenin escribe que toda la historia "muestra el valor político-práctico de una polémica teórica intransigente" (pág. 101). En los años de la reacción aumentaba inconmensurablemente el significado de aquella batalla teórica: la contrarrevolución atacaba también en el frente ideológico. Menudeaban los intentos de "crítica", es decir, de revisión de los fundamentos del marxismo. A la campaña contra el marxismo se unió una parte de los escritores del Partido, quienes, so pretexto de "defender" el marxismo, se proponían revisarlo. El combate en el frente teórico se torna importantísima tarea de los bolcheviques. Lenin denuncia y rebate a los "críticos" del marxismo, preserva los fundamentos teóricos del partido marxista.

El balance de la primera revolución rusa tenía para Lenin alcance primordial. Exhortaba al Partido Bolchevique a conservar y cultivar las tradiciones revolucionarias en la clase obrera y el campesinado, considerando esto como una de las tareas fundamentales de la propaganda y la agitación del Partido en el período de la reacción. Debemos aprovechar los períodos de calma temporal, decía, para estudiar con visión crítica la experiencia de esta revolución, contrastarla, depurarla de escorias y transmitirla a las masas como guía para las luchas venideras.

 "La revolución vino a confirmar nuestra teoría, ya que es la única teoría verdaderamente revolucionaria" (pág. 124), señala ante todo Lenin en el artículo Revolución y contrarrevolución, en el que valora el balance esencial de la primera revolución rusa. La vida había confirmado plenamente la tesis bolchevique acerca del papel dirigente (hegemonía) del proletariado en la revolución. El proletariado, en los hechos, había encabezado continuamente la revolución, y su partido marxista, en los hechos, había sido el destacamento ideológico avanzado de la clase obrera. Todo lo conquistado por el movimiento emancipador de Rusia, fue conquistado total y exclusivamente por la lucha revolucionaria de las masas encabezadas por él proletariado. Lenin escribe que el proletariado, como luchador de vanguardia del pueblo, debe robustecer su organización y cohesionar sus fuerzas para una lucha igual de firme y perseverante en el futuro: "La invencibilidad del proletariado está garantizada por el desarrollo económico de Rusia y del mundo entero" (pág. 130).

La experiencia de la primera revolución rusa vino a confirmar la exactitud de la tesis de Lenin acerca de que el campesinado es un fiel y seguro aliado del proletariado en la revolución democrática burguesa. "La masa campesina constituye... la única base de la democracia burguesa como fuerza histórica de Rusia" (pág. 131), señala Lenin. La primera revolución rusa había demostrado en los hechos que únicamente el proletariado podía ser el jefe de esta masa, que únicamente él podía conducir al campesinado en la lucha contra los terratenientes y el zarismo.

La revolución había mostrado palmariamente la índole reaccionaria de la burguesía de Rusia y su servilismo ante el zarismo. Los intereses de la gran burguesía y de los terratenientes se entrelazaban cada vez más; juntos actuaban en la lucha contra el proletariado y el campesinado; los capitalistas cerraban filas con el Gobierno. Que nuestro proletariado, escribe Lenin en Notas de un publicista, saque de la revolución burguesa rusa "un odio triplicado a la burguesía y la decisión de luchar contra ella". Los partidos pequeñoburgueses habían mostrado inmensa cobardía y blandenguería en la lucha, apostasía y servilismo respecto a los reaccionarios. Que nuestro proletariado, dice Lenin, saque de esta revolución burguesa "un desprecio triplicado a la endeblez y volubilidad de la pequeña burguesía". Lenin expresa la firme seguridad de que cualquiera que fuera el desarrollo de la revolución rusa y por muy duros que fueran los tiempos que esperaran al proletariado, este odio a la burguesía y este desprecio a los partidos pequeñoburgueses "cohesionarán sus filas, lo depurarán de elementos inservibles salidos de otras clases, multiplicarán sus fuerzas y lo templarán para asestar los golpes que habrá de descargar llegado el momento sobre toda la sociedad burguesa" (pág. 70).

Lenin presta gran atención a la elaboración de los problemas relativos al carácter de la revolución que se perfilaba en Rusia, a las condiciones y las perspectivas de su desarrollo. Partiendo de una sintetización de la experiencia de la primera revolución rusa, hizo la deducción de que no podría ser victoriosa sino como revolución campesina agraria realizada bajo la dirección del proletariado; en el momento histórico que se vivía, esta revolución democrática burguesa se transformaría inevitablemente en una revolución socialista. Lenin fundamenta todos los aspectos de estas tesis en El programa agrario de la socialdemocracia en la primera revolución rusa de 1905-1907, que integra el presente volumen. "El problema agrario —escribe— constituye la base de la revolución burguesa en Rusia y determina la peculiaridad nacional de esta revolución. La esencia de este problema es la lucha de los campesinos por acabar con la propiedad terrateniente y con los vestigios de la servidumbre en el régimen agrario de Rusia y, por consiguiente, en todas las instituciones sociales y políticas del país" (pág. 429).

Esta nueva obra sobre el tema agrario emerge de las conclusiones del libro El desarrollo del capitalismo en Rusia, en el cual tenemos la caracterización marxista de la economía y la estructura de clases del país en las postrimerías del siglo XIX y el encuadramiento de las fuerzas clasistas en vísperas de la primera, revolución rusa. El análisis leniniano ofrecía una respuesta clara a los interrogantes sobre el carácter de la revolución inminente y sus fuerzas motrices y sobre el papel a cumplir en ella por las distintas clases. Todo esto se confirmó plenamente en el transcurso de la revolución de 1905-1907. La obra El programa agrario de la socialdemocracia en la primera revolución rusa de 1905-1907 está dedicada en su parte esencial a estudiar el balance fundamental de la revolución democrática burguesa y a aclarar las perspectivas de su victoria en el futuro.

Lenin analiza y generaliza en el plano teórico la experiencia de la batalla de los bolcheviques por la conquista del campesinado como aliado de la clase obrera e investiga desde todos los ángulos posibles el desarrollo de las luchas de los campesinos por la tierra en los años de la primera revolución rusa. En estas páginas, muestra el trasfondo económico de todos los programas agrarios de esta época, lo que estaba en juego en aquella gran batalla histórica. Lenin aporta los datos sobre la distribución de la tierra: un puñado de terratenientes y otros grandes propietarios poseía casi tantas tierras como muchos millones de familias campesinas. El campesinado arruinado padecía la explotación feudal de los terratenientes y los abusos de los kulaks.

La experiencia de los dos años de revolución había hecho ver claramente el significado inmenso del movimiento campesino, de la lucha de los campesinos por la tierra. En el transcurso de la revolución se vio que los vestigios del régimen de la servidumbre en el campo eran mucho más fuertes de lo supuesto y provocaban un movimiento campesino a nivel de todo el Estado. Para lograr un desarrollo victorioso de la revolución burguesa, el proletariado debía conducir al campesinado. Lenin promueve y fundamenta la tesis de que la supresión del latifundio y otros vestigios del régimen de la servidumbre despejará el campo para la lucha de clases entre el proletariado y la burguesía y facilitará a la clase obrera, en alianza con los campesinos pobres, el combate por la revolución socialista.

En El programa agrario de la socialdemocracia en la primera revolución rusa de 1905-1907, Lenin expone la tesis sobre los dos tipos de desarrollo del capitalismo y sobre la lucha del proletariado y el campesinado en la revolución por la vía campesina, democrática de ese desarrollo.

Lenin demostró que la supresión de los vestigios del régimen de la servidumbre que frenaban el avance económico de Rusia podía producirse por dos caminos: el de las reformas en provecho de los grandes terratenientes y el de la revolución en interés del campesinado. A tono con ello perfilábanse dos líneas de programas agrarios: 1) el programa de los latifundistas, que consistía en expropiar y arruinar al campesinado, así como el programa de los demócratas constitucionalistas, próximo a aquél, que también contemplaba la subsistencia de los latifundios y la defensa de los privilegios de sus propietarios; 2) el programa de los campesinos, que consistía en expropiar a los terratenientes, en abolir el latifundio. Correspondía a los intereses de los. terratenientes la política agraria de Stolipin, política que entregaba a las masas. campesinas al saqueo de los terratenientes y kulaks y cuyo propósito era la destrucción forzosa de la comunidad campesina.

El programa campesino revolucionario de transformación agraria en Rusia es irrealizable sin una revolución política radical, subrayaba Lenin. "El campesinado no puede realizar la revolución agraria sin eliminar el viejo poder, el ejército permanente y la burocracia, pues estos son baluartes segurísimos de la propiedad terrateniente, a la que se hallan ligados con miles de lazos" (pág. 348).

Lenin pasa minuciosa revista a las etapas fundamentales del desarrollo del programa agrario de la socialdemocracia de Rusia y analiza las enseñanzas que se desprenden de su comprobación en los años de la primera revolución rusa. La vida había confirmado como un acierto la reivindicación programática bolchevique de confiscación de los latifundios y nacionalización de todas las tierras del país. Esta reivindicación tenía en cuenta las demandas apremiantes del progreso económico del país y respondía a los intereses del campesinado. Tras poner al descubierto las razones objetivas que obligaban al pequeño propietario campesino a pronunciarse en favor de la nacionalización de la tierra, Lenin muestra que sólo esta medida era capaz de suprimir totalmente el latifundio y liberar al campesinado del sojuzgamiento por parte del terrateniente y acabar con las demás trabas que entorpecían el desarrollo libre de la economía campesina, incluida la propiedad ............... [...........]

 

 

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